Tiempo es solo un segundo, un abrir y cerrar de ojos.
Tiempo es la eternidad, es el ir y venir de la humanidad.

lunes, julio 04, 2011

Cicatrices

A veces prefiero la herida abierta al proceso de cicatrización… de manera extraña mi piel funciona diferente, debido a una imposibilidad de manejar el estrés me cambia la textura de la piel y cualquier herida por pequeña que sea me queda abierta más de lo normal.


Puedo pasar mucho tiempo con la herida sin sanar y acostumbrarme a la molestia constante de sentir el aire, el agua o cualquier factor externo… sin embargo parezco volverme loca al comenzar el proceso de cicatrización, la molestia se convierte en dolor, al movimiento siento la piel estirarse, la costra rasgarse, el miedo de volver a empezar con la herida abierta.


En parte aplica en la vida, hay veces que la tristeza, depresión, decepción o enojo que sentimos preferimos llevarlo con nosotros como una molestia constante a arriesgarnos a enfrentarlo y dejarnos sentir el dolor que conlleva el comenzar con la mejoría… como buena herida debe lavarse perfectamente aunque arda antes de aplicar la medicina.


La ventaja es que al ser conscientes que la herida está a punto de sanar soportaremos ese período casi interminable en donde el dolor se agudiza con la mirada puesta en el final del proceso y no en el momento actual.


Hoy duele mucho… duele más que ayer, pero esa es la mejor señal que ha comenzado la cicatrización.

1 comentario:

Its me dijo...

El ser humano en general, tiene frecuentemente la necesidad de sentir seguridad, en lo que hace, en lo que expresa, en lo que posee, etc., lo cual no es malo ni bueno, simplemente es, el problema principal surge cuando se da cuenta que no puede tener seguridad sobre su vibración, es decir, lo que siente, lo que le emociona, y es en ese terreno donde ciertamente no tiene ni la más mínima seguridad ni control, afortunadamente claro, lo que no debe hacer es negarse a vivir sintiendo, por el temor de no saber si podrá controlarlo o no, para mí ahí está el error... Habremos enfermos que pensemos que hay que sentir todos los días, toda la vida, los hay quienes no, creo que al final de cuentas lo lamentable no es darse cuenta que hemos pasado parte de nuestra vida sin sentir, sino no hacer nada para cambiarlo...